NO HAY NADA MAS PELIGROSO QUE UN EX PROGRE TRABAJANDO EN EL GRUPO CLARÍN.
SON MUCHO MAS PELIGROSOS QUE LA OPOSICION ABURRIDA...
Fuente :radiorebelde
web@radiorebelde.icrt.cu / Ariel Larramendi
La Habana, Cuba.- Hay ciertos temas que de acuerdo a quien lo sostenga o los invoque tienen una particular forma de aceptarse o no por la llamada opinión pública mundial.
Muchos en el mundo, piensan que esa opinión pública seleccionada, no es nada más que el criterio que tienen sobre esos temas las personas que reciben información, o sea los que tienen posibilidad de consultar los periódicos, otros medios de comunicación e Internet.
Pero como se sabe, de acuerdo a investigaciones de prestigiosos institutos, la mayoría de la información que se maneja en el mundo, casi el 85 por ciento va y vienen de los países del centro, vale decir del norte capitalista desarrollado. Son aquellas que las grandes agencias diseminan en los cuatro puntos cardinales, y las que ignoran, o no le dan mucha cabida en esos grandes medios, simplemente no existen.
El escritor checo-alemán Franz Kafka tenía una frase que abarcaba estos criterios cuando decía: “Todo estaba claro desde el principio, lo importante ahora era conocerlo”.
Muchos analistas saben que la divulgación de información de los grandes centros capitalistas de occidente, corresponden a una maquinaria bien engrasada desde hace decenios, con principios y prácticas, utilizadas y perfeccionadas a través de muchos años de bombardear nuestras mentes con mentiras, informaciones superfluas y baladíes que tienen como objetivo sacar a los destinatarios de la realidad de sus entornos e idiotizarlos.
El famoso “lavado de cerebros” fue un concepto de la guerra fría con el que los medios delcapitalismo occidental acusaban a sus oponentes socialistas cuando aquellos trataban de desmontar las falacias del occidente.
La mundializacion de la información, los medios de comunicación alternativos, o sea los que no pertenecen al occidente capitalista, logran paso a paso descubrir verdades y exponerlas a la opinión pública en un esfuerzo que muchas veces se ve opacada por la inmensa masa de información amañada y manipulada procedentes de los medios hegemónicos.
Tal es el peligro que ven esos centros en los medios de comunicación emergentes o alternativos que algunos altos funcionarios norteamericanos han llegado a recomendar el bombardeo de medios como Telesur.
En la actualidad por ejemplo, muchos analistas se cuestionan el doble rasero de Washington que mientras mantiene una verdadera guerra de desinformación mediática con respecto a Libia y ahora a Siria, dos gobiernos que quiere defenestrar, se hace de la vista gorda en la agresión de Israel a la Franja de Gaza o el caso de Bahrein y la intervención de su aliado el estado feudal de Arabia Saudita en los asuntos internos de ese pequeño país, sede de la sexta flota norteamericana.
Es vergüenza sobre vergüenza para Barack Obama, en primer lugar, no cumplir con aquella promesa de cerrar la cárcel de Guantánamo, ahora se hace ostensible en el mundo de la información el hecho de que casi 130 prisioneros en ese limbo carcelario de Guantánamo, acusados de ser militantes de Al Qaeda, en realidad nunca tuvieron contacto con esa organización creada por los propios Estados Unidos, devenida terrorista según sus patrocinadores.
Un sólo ejemplo: como se conoce Estados Unidos elabora listas de países sobre algunas cuestiones sensibles a la opinión pública mundial. Listas publicadas en los cuatro puntos cardinales.
Así, algunos países que no son de la simpatía de la Casa Blanca son acusados, de no colaborar lo suficiente en la lucha contra el terrorismo, cuando en territorio de Estados Unidos tienen su nido lo peores terroristas de la historia reciente.
Y más, persigue y encarcela a personas que se juegan la vida para defender a su país de ese terrorismo calificado como bueno, patrocinado por Estados Unidos.
Fuente :radiorebelde
web@radiorebelde.icrt.cu / Ariel Larramendi
La Habana, Cuba.- Hay ciertos temas que de acuerdo a quien lo sostenga o los invoque tienen una particular forma de aceptarse o no por la llamada opinión pública mundial.
Muchos en el mundo, piensan que esa opinión pública seleccionada, no es nada más que el criterio que tienen sobre esos temas las personas que reciben información, o sea los que tienen posibilidad de consultar los periódicos, otros medios de comunicación e Internet.
Pero como se sabe, de acuerdo a investigaciones de prestigiosos institutos, la mayoría de la información que se maneja en el mundo, casi el 85 por ciento va y vienen de los países del centro, vale decir del norte capitalista desarrollado. Son aquellas que las grandes agencias diseminan en los cuatro puntos cardinales, y las que ignoran, o no le dan mucha cabida en esos grandes medios, simplemente no existen.
El escritor checo-alemán Franz Kafka tenía una frase que abarcaba estos criterios cuando decía: “Todo estaba claro desde el principio, lo importante ahora era conocerlo”.
Muchos analistas saben que la divulgación de información de los grandes centros capitalistas de occidente, corresponden a una maquinaria bien engrasada desde hace decenios, con principios y prácticas, utilizadas y perfeccionadas a través de muchos años de bombardear nuestras mentes con mentiras, informaciones superfluas y baladíes que tienen como objetivo sacar a los destinatarios de la realidad de sus entornos e idiotizarlos.
El famoso “lavado de cerebros” fue un concepto de la guerra fría con el que los medios delcapitalismo occidental acusaban a sus oponentes socialistas cuando aquellos trataban de desmontar las falacias del occidente.
La mundializacion de la información, los medios de comunicación alternativos, o sea los que no pertenecen al occidente capitalista, logran paso a paso descubrir verdades y exponerlas a la opinión pública en un esfuerzo que muchas veces se ve opacada por la inmensa masa de información amañada y manipulada procedentes de los medios hegemónicos.
Tal es el peligro que ven esos centros en los medios de comunicación emergentes o alternativos que algunos altos funcionarios norteamericanos han llegado a recomendar el bombardeo de medios como Telesur.
En la actualidad por ejemplo, muchos analistas se cuestionan el doble rasero de Washington que mientras mantiene una verdadera guerra de desinformación mediática con respecto a Libia y ahora a Siria, dos gobiernos que quiere defenestrar, se hace de la vista gorda en la agresión de Israel a la Franja de Gaza o el caso de Bahrein y la intervención de su aliado el estado feudal de Arabia Saudita en los asuntos internos de ese pequeño país, sede de la sexta flota norteamericana.
Es vergüenza sobre vergüenza para Barack Obama, en primer lugar, no cumplir con aquella promesa de cerrar la cárcel de Guantánamo, ahora se hace ostensible en el mundo de la información el hecho de que casi 130 prisioneros en ese limbo carcelario de Guantánamo, acusados de ser militantes de Al Qaeda, en realidad nunca tuvieron contacto con esa organización creada por los propios Estados Unidos, devenida terrorista según sus patrocinadores.
Un sólo ejemplo: como se conoce Estados Unidos elabora listas de países sobre algunas cuestiones sensibles a la opinión pública mundial. Listas publicadas en los cuatro puntos cardinales.
Así, algunos países que no son de la simpatía de la Casa Blanca son acusados, de no colaborar lo suficiente en la lucha contra el terrorismo, cuando en territorio de Estados Unidos tienen su nido lo peores terroristas de la historia reciente.
Y más, persigue y encarcela a personas que se juegan la vida para defender a su país de ese terrorismo calificado como bueno, patrocinado por Estados Unidos.
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